Por Dina Denham Smith🖊️
Los líderes han sido históricamente el receptáculo de las emociones negativas en el lugar de trabajo, escuchando quejas de los empleados sobre situaciones difíciles, conflictos con colegas y decepciones por promociones perdidas. Sin embargo, con los cambios en el entorno laboral y las crecientes expectativas de los empleados sobre el apoyo emocional de sus gerentes, los líderes ahora manejan una gama aún más amplia de temas complejos. Estos incluyen el agotamiento, problemas de salud mental, problemas familiares o de pareja, preocupaciones médicas y estrés financiero.